Economía

Euskadi se alía con Europa y las eléctricas para presionar contra el decreto de la luz

El Congreso decide hoy sobre la normativa mientras los nacionalistas intentan mantener el equilibrio entre apoyar a la industria sin desairar a eléctricas, y esperan "retoques" para decidir su voto

14 octubre, 2021 05:00

El Congreso de los Diputados aprobará hoy casi con toda probabilidad el decreto que reduce los beneficios de las eléctricas pese a la ofensiva puesta en marcha desde Euskadi contra la aprobación de esta normativa.

PNV, Gobierno y patronal vasca se han aliado a la hora de cargar contra el decreto del Gobierno coincidiendo así con el rechazo de las eléctricas, que, como Iberdrola, amenazan con paralizar inversiones en renovables en el caso de que la normativa salga adelante.

El PNV, socio prioritario del Gobierno de cara a la aprobación de los Presupuestos Generales, mantiene la incógnita sobre cuál será el sentido de su voto y espera un gesto de Sánchez en forma de "retoque" del decreto o de compromiso de hacerlo para optar por su apoyo o no.  "Está en juego la economía y también el futuro de su gobierno", advertía ayer Aitor Esteban al presidente Sánchez durante la sesión de control del Gobierno en un claro aviso a navegantes de cara a la próxima negociación de los Presupuestos, donde el voto nacionalista puede ser determinanate.

Los nacionalistas quiere mantener el equilibrio entre la presión al Ejecutivo central sin abandonar su papel de socio preferente en las negociaciones, pero quieren arrancar de Sánchez garantías de que se protege a las empresas industriales y no acaban siendo las paganas de la reducción de los beneficios de las eléctricas, algo que tendria importantes repercusiones sobre la economía vasca y podria retrasar la recuperación.

El hecho de que una empresa como Sidenor haya anunciado que detendrá la producción durante 20 días hasta final de año por el elevado precio de la energía ha encendido todas las alarmas ante el temor real de que haya un efecto dominó y que se multipliquen las empresas que se ven abocadas a paradas de producción que puedan acabar en ERTE. De hecho, la consejera Arantxa Tapia reconocía ayer que "no son ni una ni dos" las empresas que les han trasladado que tienen dificultades para hacer frente al recibo de la luz.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se mostraba ayer dispuesto a revisar el decreto para ofrecer garantía a las empresas industriales de que las eléctricas no las elevarán su factura a la industria, pero está por ver si eso será suficiente para que el PNV se incline por el sí. Hay que tener en cuenta que la postura respecto a los apoyos a Sánchez no es el único equilibrio que debe mantener en estos momentos el PNV, que se enfrenta a la necesidad de  defender a la industria vasca en general ante la subida del precio de la luz sin desairar a las eléctricas y en especial a Iberdrola, de la que muchas empresas vascas son proveedores directas y que es socio, además del Ejecutivo vasco en varios proyectos muy importantes como el de los parques eólicos con Aixendar o de placas fotovoltáicas.

Esteban señalaba por eso en el Congreso que era  necesario "impedir" que las empresas eléctricas "jueguen a su antojo" con las posibles fuentes de generación "para sacar el máximo beneficio" y que "no es aceptable que utilicen a las empresas de ariete para sus propios intereses", pero  a la vez consideraba que era una solución "simplona" la de recortar los beneficios a las eléctricas

El Gobierno de PSOE-Unidas Podemos tiene prácticamente garantizada la aprobación del decreto con los apoyos con los que cuenta actualmente, ya que se espera que voten a favor, además de los partidos que lo forman,  Ezkerra Republicana, EH Bildu, MásPaís, la CUP, el BNG y Nueva Canarias. Pero es de esperar algún gesto que proteja a las empresas y que permita el apoyo del PNV, lo que le garantizaría una imagen de mayor unidad en el bloque que puede sacar adelante los Presupuestos.

A la presión del PNV se ha sumado también ayer la del propio Gobierno vasco, que pide a Sánchez que elimine los impuestos del recibo de la luz, especialmente para las industrias, aunque también para particulares. Una medida que permitiría reducir en un 45% el precio del recibo de la luz. Es decir, reducir el coste de la energía, al margen de los beneficios de las eléctricas.  Una propuesta que se encontró ayer con el apoyo de la Comisión Europea, que propone que los Estados rebajen sus impuestos o arbitren ayudas especiales para aminorar el impacto de la subida de la luz. 

Aunque el Ejecutivo vasco asegura que está planteando una serie de medidas que permitan reducir el impacto del recibo de la luz sobre la industria, es consciente de que puede hacer poco más que la propuesta fiscal que dependería, además del Gobierno central, ya que no son tasas sobre las que tengan competencia las Haciendas forales.

También los empresarios vascos han cargado contra el decreto, y en una carta a la vicepresidenta Teresa Ribera, alertaron ayer  in extremis' -a penas 24 horas antes de aprobarse- de las consecuencias que puede traer para la industria al repercutir las eléctricas sobre sus contratos la reducción de los beneficios