Economía

Euskadi ajustará el termostato a partir de septiembre: 20 grados en invierno y 25 en verano

El plan de contingencia que prepara el Gobierno vasco incluye limitar la temperatura en todos los edificios dependientes de todas las administraciones públicas vascas

29 julio, 2022 12:14

Euskadi ya ha puesto sobre la mesa las primeras medidas de contigencia por la situación actual del gas. Representantes del Gobierno vasco, las diputaciones y Eudel se han reunido este viernes en el seno del Grupo Institucional de Sostenibilidad Energética para preparar las medidas de eficiencia energética que les competen dentro del plan de contingencia anunciado por la consejera de Desarrollo Económico y Competitividad, Arantxa Tapia, para administraciones, hogares y empresas de cara a hacer frente a la situación de "emergencia energética" provocada por la invasión rusa de Ucrania. Un borrador cuya aprobación está prevista para el próximo 1 de septiembre.

Y ya hay algunas cuestiones concretas: limitar la calefacción a 20 grados en invierno y el aire acondicionado a 25 en verano en los edificios dependientes de todas las administraciones públicas vascas. En cuanto a la iluminación, el objetivo es la sustitución paulatina de todos los aparatos por bombillas led, el control de los horarios de encendido y el uso de sensores en pasillos y baños. Además, se insiste en que todos los equipos informáticos deben quedar apagados al acabar el horario laboral.

Las instituciones consideran que se debe evitar el uso de calefactores individuales de resistencia y que los sistemas de calefacción y agua caliente deben tender al uso de electricidad con bombas de calor o renovables. El borrador incluye también la posibilidad de colocar instalaciones fotovoltáicas de autoconsumo en los tejados de los edificios y en el área de movilidad apuesta por promover el desplazamiento sostenible para el acceso al trabajo, ya sea a pie, bicicleta o transporte público.

La consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia. / IREKIA

La consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia. / IREKIA

No habrá limitaciones del suministro de gas

La consejera ha insistido en que no se trata de sancionar a las administraciones que no cumplan estas medidas, sino de que adquieran el compromiso de ir poniéndolas en marcha una vez que se apruebe la instrucción en septiembre, teniendo en cuenta las características de cada edificio, ya que no es lo mismo, un colegio, un hospital o una comisaría.

Hace escasos días, la Unión Europea lograba un acuerdo para ahorrar gas ante posibles cortes rusos. Ese mismo día, Tapia descartaba que vayan a darse limitaciones del suministro de gas en Euskadi de cara al próximo otoño e invierno. No obstante, recalcaba que se está "en alerta energética" y "hay que actuar". Ahí es donde entra este Plan de Contigencia. Y hay más voces que tratan de mitigar esta alarma. el director del EVE, Íñigo Ansola, ha asegurado que Euskadi tiene garantizado el suministro de gas, gracias a lo que se almacena en Bahía Bizkaia y el aumento del gas traído en barco de otros países como Estados Unidos y Nigeria para suplir las importaciones rusas.

Termostato a 20-21 grados en el interior de una casa. / EP

Termostato a 20-21 grados en el interior de una casa. / EP

Medidas para los hogares y la industria

Este nuevo Plan de Contigencia tendrá más medidas de ahorro dirigidas a la administración, a la industria y a los hogares. En lo que afecta a ciudadanos y a los hogares, las medidas irán encaminados a intensificar las campañas de divulgación desde los medios de comunicación para concienciar de todo lo que se puede hacer en la vida diaria de un hogar para ahorrar energía.

En cuanto a las medidas relacionadas con la industria, la intención es activar "canales de contraste" entre las empresas que demandan energía y las que la ofertan, proceso que podría comenzar en septiembre, dado que en agosto muchas actividades industriales paran. También se enmarcan en este objetivo varias convocatorias de ayudas. En lo que respecta a la gestión de residuos, apuntan desde el departamento, cada tonelada de papel que se recicla evita que se corten 14 árboles, se consuman 50.000 litros de agua y más de 300 kg de petróleo.