Economía

El Gobierno aprueba un nuevo plan para aumentar hasta el 40% el peso de la industria en el PIB vasco

El Plan de Desarrollo Industrial e Internacionalización 2021-2024 estará dotado con un presupuesto de 4.106 millones de euros, de los que 1.642 corresponden a este año

20 julio, 2021 13:12

El Gobierno vasco ha aprobado este martes el Plan de Desarrollo Industrial e Internacionalización 2021-2024 que pretende conseguir que al final de este periodo el 40% del PIB  vasco lo componga la industria manufacturera  y los servicios avanzados, El plan estará dotado con un presupuesto inicial para este año  de 1.642 millones, y se estima que hasta 2024 pueda contar con una dotación de  4.106 millones de euros  con el objetivo de convertirse en "la principal herramienta para la recuperación y la transformación de la economía vasca" 

La consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, ha señalado que el plan "contribuirá a la recuperación económica atendiendo a los retos coyunturales provocados por la pandemia y al posicionamiento de la industria vasca con mirada de futuro y rasgos propios del siglo XXI".

El plan tendrá un carácter trasversal, por lo que estará alineado con el conjunto de planes y estrategias de Euskadi orientadas a la competitividad (PCTI2030; Estrategia de Transformación Digital 2025; Berpiztu, Plan Estratégico de Transición Energética y Cambio Climático 2021- 2024) y en el marco del Basque Green Deal. Además, apuesta por la colaboración público-privada y público-pública, y sin duplicidades con otros niveles institucionales.

Además de contribuir a acelerar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030, se propone superar el 40% del PIB en la industria y los servicios avanzados, y alcanzar la propensión exportadora de un tercio del PIB en Euskadi al final del periodo, así como incrementar la tendencia de las empresas vascas a establecer implantaciones en el exterior.

La I+D será una de las apuestas fundamentales del plan, ya que pretende convertir tanto en inversión como en resultados con la media europea y hacer de Euskadi un "polo de innovación europeo",  incrementar un 10% la creación de empresas tecnológicas y posicionar a Euskadi como "ecosistema tractor de startups" internacionales que colaboren con la industria local.

El nuevo plan plantea aprovechar las "oportunidades aceleradas" por la pandemia de la Covid-19 para la generación de nuevas actividades en ámbitos relacionados con las transiciones energético-climática y tecnológico-digital, apostando también por nuevas áreas en torno a la transición demográfico-social, entre otras.

Oportunidades "excelentes"

Tapia ha afirmado que las previsiones de la industria en Euskadi son "buenas", y que "las oportunidades que se pueden abrir son, incluso, excelentes", y ha considerado que una buena prueba de ello es que la respuesta que ha dado hasta ahora la industria vasca a los programas para la inversión y la mejora competitiva. "Está siendo abrumadora", ha dicho.  Por ello, ha considerado que con este plan "el objetivo no puede limitarse volver a la situación en la que nos encontrábamos junto antes de la llegada el Covid, sino coger la siguiente ola y dar un nuevo salto cualitativo para posicionar a la industria vasca como un referente internacional y que en Euskadi contribuya al empleo de calidad y a generar riqueza y bienestar", ha señalado Tapia.

En cuanto a la internacionalización empresarial, que se reactivará a medida que se extiende la vacunación frente a la Covid, ha señalado que se  mantiene a Estados Unidos como el mercado prioritario, pero, que además de los países habituales más consolidados en Europa, como son Alemania, Francia y el propio Reino Unido, este nuevo Plan hace una "apuesta contundente" por los mercados asiáticos.

Por otra parte, ha anunciado que a finales de este año 2021, la Agencia Vasca de Internacionalización abrirá una nueva delegación comercial en Japón (Tokyo), con previsión de una segunda oficina en Corea (Seúl).

La consejera ha destacado que el Plan de Internacionalización Empresarial 2017-2020 contribuyó a reforzar la evolución de las exportaciones de Euskadi, que han crecido más de un 17,5% entre el año 2016 y 2019 (de 21.616 millones de euros en 2016 a 25.397 millones de euros en 2019), hasta sufrir el impacto derivado de la crisis causada por la covid-19 en el año 2020.

Los principales objetivos cara al 2024 serán alcanzar al final del período la propensión exportadora de Euskadi de un tercio del PIB; incrementar la tendencia de las empresas vascas a establecer implantaciones en el exterior, y aumentar en un 10% la cifra de proyectos en los servicios de impulso a la internacionalización.

Palancas de actuación del plan

El plan incluye medidas de apoyo a empresas que se encuentren en dificultades y que se hayan visto más afectadas por la crisis y áreas desfavorecidas. Se acompañará a las empresas en dificultades coyunturales con iniciativas e instrumentos financieros orientados al acompañamiento a las empresas en dificultades coyunturales; dependiendo de la viabilidad del proyecto, bien puede ser para promover su futura consolidación y relanzamiento o para su ordenada disolución.

También se impulsarán las zonas con necesidades de reindustrialización con iniciativas dirigidas al impulso de la promoción y ordenación industrial de zonas de Euskadi con especiales necesidades de reindustrialización, impulsar su competitividad.

Otro de los ejes del plan es la transformación y renovación de la competitividad. Se prevé aprovechar el sistema de competitividad existente sometiéndolo a un proceso de transformación y renovación en líneas con las mega-transiciones que se están produciendo a nivel global.

En este sentido, identifica la transición energético-climática como palanca de transformación y nuevas oportunidades industriales y señala como áreas de oportunidad: la cadena de valor de la eólica offshore; la economía del hidrógeno; el almacenamiento de energía; la innovación en la movilidad sostenible --vehículos autónomos y conectados, uso de combustibles alternativos--; los nuevos combustibles eficientes --e-fuels o biogás-- y la economía circular y bioeconomía.

También señala la transición digital como "palanca de transformación y nuevas oportunidades industriales" entre las que destaca como áreas de oportunidad la Ciberseguridad; la Inteligencia artificial y la Computación cuántica.

Otra de las palancas que señala es la transición demográfico-social en lo que se refiere a la Salud digital; la Alimentación saludable y autocuidado; la Aplicación de tecnologías de ingeniería al cuidado y a la salud; la Terapia génica, celular y regenerativa; el Sistemas IVD-POC; el Envejecimiento saludable y las Tecnologías auxiliares para el hogar, la movilidad y el ocio.