Economía

Las Haciendas vascas aumentan el control sobre la inversión en criptomoneda

Gipuzkoa avanza en el Plan de Comprobación Tributaria que exigirá información de los inversores a las agencias que gestionan la compra de moneda virtual

3 abril, 2021 05:00

Las Haciendas forales siguen avanzando para tener controlada la cantidad de dinero que los contribuyentes vascos tienen invertida en cualquiera de los tipos de moneda virtual que hay actualmente en el mercado de la criptomoneda. Además de la declaración de la información sobre la cantidad invertida, se anuncian nuevos pasos para que las empresas que gestionan estas inversiones, informen a Hacienda de quiénes han invertido y cuánto. La semana pasada Gipuzkoa publicó en su su "Plan de Comprobación Tributaria para 2021", que se está estudiando la elaboración de un modelo informativo en el que estos intermediarios deberán trasladar la identidad y cuantía de los compradores de moneda virtual. Bizkaia ya avanzó está línea en su Plan de Lucha Contra el Fraude presentada en enero. 

La Diputación de Gipuzkoa fue de las primeras administraciones que, en 2013, comenzó a exigir que en el modelo que hace referencia a la declaración de bienes en el extranjero se declarara la inversión en moneda digital. Ahora, en la línea tratada también en el Órgano de Coordinación Tributaria entre las tres Diputaciones, acaba de publicar el pasado 22 marzo en su Plan de Comprobación Tributaria que pondrá en marcha un análisis e investigación sobre la operativa de las monedas virtuales. Además, recuerda la obligación que tienen los contribuyentes de informar de la inversión en criptomoneda cuando supere los 50.000 euros y anuncia el estudio de un nuevo formulario por el que serán los gestores de esa inversión los que deban comunicar quién y cuánto invirtió. 

La Diputación de Bizkaia es la que más ha avanzado en esta materia y ya anunció en enero en su Plan de Lucha contra el Fraude para el año 2021, establece con claridad que se va a establecer una “ampliación de las obligaciones de suministro de información” a las personas “titulares de monedas virtuales”, pero también a las “entidades” que presten los servicios necesarios para realizar la inversión. Evidentemente, se trata de una obligación que sólo corresponde a ciudadanos y empresas domiciliados en territorio foral.Fuentes de la Hacienda vizcaína han explicado además que, dentro del servicio de inspección tributaria se ha creado un grupo de trabajo sobre “criptomoneda y economía virtual” para analizar, no sólo la situación de las monedas virtuales, sino también la situación del comercio online que, con portales como Alibaba cada vez generan más problemas sobre la localización de la transacción económica.

En la Hacienda alavesa también llevan trabajando en la criptomoneda desde hace tiempo “realizando actuaciones, algunas de las cuales ha derivado en regulación”.

La Agencia Tributaria del Estado también ha anunciado que exigirá información sobre los titulares de criptomoneda, así lo especifica en el Plan de Control Tributario y Aduanero de 2021 publicado el pasado mes de febrero. 

El criterio fiscal es claro

Desde las Diputaciones recuerdan el criterio fiscal, que es claro. Cualquier plusvalía obtenida por la venta de cualquier moneda virtual debe declararse como ganancia patrimonial en el IRPF, al igual que ocurre, por ejemplo, con las ganancias por las ventas de acciones de Bolsa. Y, a efectos del Impuesto de Patrimonio, debe darse cuenta de la cantidad que posee el contribuyente para calcular su base imponible. La cuestión es sencilla una vez que la inversión en moneda virtual se ha liquidado y hay euros en una cuenta corriente.

El problema es cómo las Haciendas forales acceden a la información sobre los titulares de criptomoneda cuando esta no se ha declarado ni se ha liquidado. Por ello, la línea de trabajo que desarrollarán en este año las Haciendas forales es la de elaborar un modelo informativo para captar la información, no sólo del contribuyente, sino también de la empresa intermediaria para la inversión. Es un paso para buscar, a través de la información compartida de las adminisrtaciones tributarias, el cruce de datos que permita identificar a los titulares de cada inversión. La medida obliga a informar a las agencias intermediarias para la compra de criptomoneda de quiénes son sus clientes y cuánto han invertido en esta divisa virtual.