Economía

Los 'private equities' se postulan como la opción para garantizar el arraigo de las empresas vascas

La Universidad de Deusto organiza un coloquio para exponer los retos y oportunidades de los fondos de capital riesgo para el tejido industrial vasco

18 mayo, 2022 13:59

Los ‘private equity’ cogeN impulso en Euskadi. Esta herramienta estratégica y financiera sirve para impulsar la capitalización de pequeñas, medianas y grandes empresas. Con ella se busca impulsar “el arraigo de los centros de decisión empresariales en Euskadi”, ha advertido Agustín Garmendia, presidente de Deusto Business Alumni.

Los fondos de capital riesgo, así como los retos y oportunidades que suponen en Gipuzkoa han sido el eje central del coloquio celebrado en la facultad donostiarra de la Universidad de Deusto este martes bajo el título de “Una oportunidad de crecimiento empresarial con arraigo”. Además de Garmendia, en el evento han participado Cristina Garmendia, socia de Ysios Capital; Jabier Larrañaga, diputado de Promoción Económica, Turismo y Medio Rural de la Diputación Foral de Gipuzkoa; José Poza, patrono de la Fundación Artizarra; y Juan Alcibar, Socio de M&A en PwC, moderador del evento.

En la historia del desarrollo económico de Euskadi, los bancos y las cajas de ahorros vascas impulsaron vía créditos la actividad empresarial y tomando participaciones directas en el capital de las principales empresas (Iberdrola, CAF, Euskaltel, Petronor…). Tras la crisis financiera, siguiendo las nuevas guías de riesgo implementadas por el banco central europeo, “los bancos no tienen posibilidades de continuar con la política de toma de participación directa en el capital de las empresas”, ha explicado Garmendia. En esta nueva situación, siguiendo el modelo anglosajón, irrumpe el ‘private equity’ en Euskadi.

El private equity es una herramienta estratégica, un socio temporal. “El dinero es secundario, se trata de una serie de personas con una especialización que van a apoyar un proyecto de futuro con dinero”, ha señalado Poza.  De esta forma, el fondo de capital riesgo consiste en llevar a cabo inversiones profesionales durante un periodo a cambio de una participación en empresas de las que se espera un alto crecimiento con el objetivo de hacerlas crecer, fortalecerlas y conseguir que sean más rentables.

Las empresas vascas de entre 10 y 100 trabajadores optan a ayudas para elaborar su plan de igualdad. / EP

Las empresas vascas de entre 10 y 100 trabajadores optan a ayudas para elaborar su plan de igualdad. / EP

Construir valor junto con la empresa

Cristina Garmendia ha explicado que las gestoras construyen valor junto con la empresa y luego buscan un relevo que “puede ser otro inversor, el mercado de capitales u otra empresa”. Es entonces cuando la gestora tiene que devolver a sus inversores la inversión. Así, para una gestora de fondos el proceso implica “una inversión, desarrollo del proyecto y una desinversión”. En palabras de Poza, “compramos capital para invertir por un proyecto que las entidades financieras no pueden ver”. La fase final de una gestora pasa por devolver la inversión comprometida con una previsión de rentabilidad.

Para apoyar proyectos empresariales, una gestora levanta su fondo con el apoyo de entidades que apuestan por el equipo que la conforman. “La confianza es fundamental”, ha destacado la socia de Ysios Capital. Los inversores de estos fondos son las aseguradoras y fondos de pensiones, agentes institucionales y familias

“Las empresas que quieren crecer necesitan acompañamiento, no lo pueden hacer solas. Necesitan personas capaces de entender el producto y el mercado”, ha apuntado  Larrañaga, quien ha añadido que en Gipuzkoa “cuesta escalar” los proyectos empresariales. En esta línea, Garmendia reconoce que en el territorio ya hay unas cuantas gestoras que hacen que Gipuzkoa disponga de “una aureola de private equity potente”. 

Investigadores Viralgen. EFE

Investigadores Viralgen. EFE

Crecer con arraigo en el territorio

Cristina Garmendia remite al caso de Viralgen para hablar del crecimiento de la empresa que va de la mano del arraigo. “Si la industria ve un buen proyecto anclado en un territorio donde el ecosistema funciona, la empresa invierte para desarrollar el sistema”, ha apuntado. En esta línea, la industria se posiciona en un territorio estratégico para su estrategia global, es decir, “desde Gipuzkoa para el mundo”. Así, “la posibilidad de que el relevo arraigue la inversión es altísima”. 

Además, se trata de una dinámica positiva con “un impacto en personas cualificadas muy grande”. En consecuencia, estos proyectos atraen talento y hacen del tejido empresarial “un círculo virtuoso”.

Aún con todo, el diputado de Promoción Económica, Turismo y Medio Rural, ha señalado que "faltan más casos de éxito" para que las empresas guipuzcoanas vean que hay recorridos de crecimiento que "no los pueden hacer solas".