Empresas

La pandemia aumenta las ausencias en Michelin en más de un 55%

El tsunami de contagios fuerza un arranque de año con la fabricación tensionada a la espera de la evolución de la sexta ola generada por la variante ómicron del coronavirus

4 enero, 2022 05:00

Uno de los pulmones económicos de Euskadi, la fábrica de Michelin situada en Vitoria está manteniendo su ritmo de producción, pero a los problemas de suministro registrados en los últimos meses ahora se añade otra dificultad. Se trata de cuadrar los turnos de trabajo de sus más de 3.000 trabajadores que no escapan a los efectos de la nueva ola de contagios por coronavirus. Esta situación, según confirman fuentes de la compañía a 'Crónica Vasca', ha elevado las ausencia de trabajadores en más de un 55%.

A pesar de las dificultades, la fabricación se está manteniendo al ritmo previsto, pero sí está tensionando, sobretodo a la espera de los próximos días y la evolución de los futuros contagios que los expertos señalan todavía se incrementarán durante dos semanas. Fuentes de la empresa remarcan que todos los contagios han tenido lugar en el exterior de las instalaciones y no durante el trabajo. 

Y es que, desde el 27 de diciembre, 67.570 vascos se encuentran confinados en sus casas por haber dado positivo en la última semana. Son casi 100.000 personas que han dado positivo por coronavirus en los últimos siete días y mantienen su aislamiento domiciliario, ya sea de 10 o de 7 días, según sus afecciones, con el consecuente efecto que ello supone para el ámbito laboral, debido a las miles de bajas por enfermedad covid que hay estos días en Euskadi. Una avalancha de bajas que se acrecienta ante el récord de contagios diarios que está produciendo la sexta ola de la pandemia en el País Vasco, aunque no es un problema de exclusividad vasca y por el que Sanidad decidió reducir la pasada semana el periodo de aislamiento a 7 días para casos leves y asintomáticos, siguiendo la senda marcada por países como el Reino Unido y Estados Unidos con el objetivo de evitar la paralización de la economía.

La falta de suministros en el sector industrial, los altos precios en las materias primas y el repunte de la inflación que se situaba en el 6,7% en el pasado mes de diciembre, debido en buena parte por el aumento de los precios de la electricidad, se suma en este inicio de curso las bajas médicas que padece el ámbito laboral ante la elevada tasa de contagios que afecta a la comunidad vasca. Una tasa de positividad de récord que tiene su impacto en el confinamiento de las plantillas de trabajadores en diferentes sectores laborales tanto del ámbito público como del privado que acrecientan aún más la cuesta de enero y el retorno al trabajo en este primer mes del nuevo año.