Bizkaia

El controvertido concejal de Urbanismo de Erandio pierde otro pleito judicial con un vecino

Egoitz Bilbao fue acusado de un posible delito de prevaricación y ha protagonizado varios incidentes con vecinos y trabajadores del consistorio

27 octubre, 2021 05:00

El controvertido concejal de Urbanismo de Erandio, Egoitz Bilbao (PNV), quien fue acusado de un posible delito de prevaricación y ha protagonizado varios incidentes con vecinos y trabajadores del consistorio, ha perdido otro pleito judicial. Un juzgado de Bilbao ha archivado una denuncia que interpuso el concejal contra un vecino por supuestas amenazas. Es la tercera demanda que pierde el edil en los últimos años por denuncias presentadas por él mismo contra vecinos y establecimientos hosteleros.

Según la versión del concejal, un vecino le amenazó en diciembre pasado en un bar con expresiones como  “te voy a dar dos hostias y te voy a matar”. Pero un juzgado de Bilbao, que investigó el caso, lo ha archivado al no encontrar ninguna prueba de esas amenazas. Se basa fundamentalmente en el informe de una ertzaina, que estaba en el establecimiento cuando ocurrieron los hechos, y certificó que el vecino únicamente habló en voz alta “y con cierto tono amenazante pero no que le dijera: “sal fuera que te voy a dar dos hostias””.

La gestión del concejal Egoitz Bilbao ha estado rodeado por la polémica desde hace bastantes años en un municipio con graves problemas urbanísticos, ya que funciona con las normas subsidiarias de hace 28 años. Debería haber renovado su planeamiento en 2001 y tampoco ha aprobado el nuevo Plan General, que tendría haberse puesto en marcha en 2006. Esta situación ha provocado que multitud de negocios y edificios en la localidad no cumplan las obsoletas normas de 1993.  Entre ellos, el Batzoki (la sede social del PNV, que gobierna el consistorio), que lleva 43 años sin licencia de actividad.

La apertura, hace un año, de una investigación judicial contra el concejal Egoitz Bilbao por un posible delito de prevaricación tuvo importantes consecuencias. Aunque las pesquisas se archivaron, el edil fue despojado poco después de gran parte de sus responsabilidades.

Egoitz Bilbao era, tras la alcaldesa Aitziber Oliban, el concejal con más poder en el consistorio, ya que aglutinaba la responsabilidad de las dos principales áreas en cualquier municipio: Urbanismo y Obras y Servicios. También se encargaba de Medio Ambiente y Viviendas Municipales y era el coordinador del área de Territorio.

En octubre del pasado año, dejó de acudir a su puesto en este ayuntamiento vizcaíno tras acogerse a una baja laboral. La alcaldesa firmó un decreto de alcaldía el 13 de octubre de 2020 (nueve días después de que se conociera, a través de este blog, que un juzgado investigaba a Egoitz Bilbao por prevaricación,) en el que se informaba de que pasan a la Alcaldía todas las funciones del edil. La resolución, publicada en el Boletín Oficial de Bizkaia el 26 de octubre, dejaba sin ninguna responsabilidad al concejal desde el 7 de octubre, “y continuará en vigor hasta tanto en cuanto se dicte una nueva resolución”. En concreto, se le retiraba su condición de concejal de Urbanismo, Planeamiento y Gestión urbanística, Viviendas municipales e Inventario de caminos de titularidad pública, Obras, Servicios y Medio Ambiente.

Sin embargo, no se hacía mención a su cargo de coordinador-delegado del área de territorio, al que se asocia su retribución con dedicación exclusiva, un total de 59.980 euros anuales, según aparece hoy día en la web del Ayuntamiento de Erandio.

Bilbao se reincorporó en diciembre, pero con menos funciones en el consistorio. Aunque la alcaldesa no ha publicado en el Boletín Oficial de Bizkaia la restitución como edil de Urbanismo, fuentes municipales han confirmado que se le devolvieron sus competencias pero con funciones muy limitadas.  De hecho, la alcaldesa o el secretario firman gran parte de los asuntos relacionados con el urbanismo.

Concejal de Urbanismo desde 2013, ha tenido innumerables problemas con vecinos debido a su carácter “agrio”, según señalan fuentes municipales y residentes, y algunos le han presentado denuncias. Incluso ha tenido problemas con los trabajadores municipales, que en 2018 enviaron un escrito al anterior alcalde, en el que afirmaban que “acudían a trabajar con miedo a la actitud del concejal”  Egoitz Bilbao. En el escrito, conminaban al alcalde a que “le paraba él o lo hacía” el comité de los trabajadores “por lo civil o lo penal”.

El último episodio fueron las supuestas amenazas de un vecino al edil, el pasado 30 de diciembre, en el Batzoki de Erandio, El concejal estaba en el interior con Gorka Carro, ex alcalde de Sondika por el PNV, cuando un vecino entró en el local. Según Egoitz Bilbao, el vecino le dijo: “te voy a pegar dos ostias y te voy a matar”.

En la sentencia dictada el pasado 23 de junio, la titular del juzgado de instrucción número 8 de Bilbao señala que estas amenazas, expresadas por el exconcejal en el juicio celebrado el pasado junio, “no es coincidente con la denuncia”, en la que no aparece la expresión “te voy a matar”. “La falta de coincidencia resta veracidad en la versión del denunciante”, señala la jueza en su sentencia.

La magistrada se basa, para archivar la denuncia, en un informe de una ertzaina presente en el batzoki, en el que “no consta que el denunciado [el vecino] manifestara las expresiones amenazantes denunciadas”. “Únicamente”, agrega la sentencia, “se hace constar que el denunciado hablaba en voz alta y con cierto tono amenazante pero no que le dijera “sal fuera que te voy a dar dos ostias””.

Por ello, absuelve al vecino de un delito de amenazas. La sentencia es ya firme desde el pasado 3 de octubre, ya que el concejal no ha presentado ningún recurso.