La gestión de la atención primaria de Osakidetza en la nueva ola de contagios del coronavirus está dejando mucho que desear. Los problemas para pedir cita con el médico, la suspensión de consultas y tratamientos, así como la falta de personal y medidas como hacer los rastreos por 'sms' no son excusables a esta alturas. La emergencia sanitaria es muy compleja de gestionar, pero ya no es algo nuevo y, además, hay experiencias de éxito en la gestión como ha sido el caso de la administración de la vacuna. Y lo que es peor, el Gobierno vasco cuenta con excedentes y remanente de tesorería para afrontar los gastos extraordinarios. Por lo tanto esta situación sí se puede atribuir a un fallo en la gestión del Gobierno Urkullu.

Además, el Ejecutivo vasco ha tardado una semana en presentar en el Tribunal Superior de Justicia la solicitud de ampliación del pasaporte covid. El viernes de la semana pasada anunció esta decisión, pero no lo ha hecho hasta siete después.