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Una ‘ceguera silenciosa’: qué es el glaucoma y cómo se trata

Se trata de una afectación importante en la oftalmología, ya que puede afectar hasta un 2% y 3% de la población mayor de 40 años

11 marzo, 2021 23:11

El glaucoma es un grupo de enfermedades oculares que producen daños en el nervio óptico de manera progresiva. La lesión a menudo está provocada por una presión excesiva en el globo ocular.

Esto provoca pérdidas en el campo visual, a medida que aumenta la lesión, lo que se llama neuropatía óptica potencialmente progresiva. Se trata de una afectación importante en la oftalmología, ya que puede afectar hasta un 2% y 3% de la población mayor de 40 años.

Tensión ocular

Por ello, el responsable del servicio de Oftalmología del Hospital Quirónsalud Vitoria, Pío García Gómez, considera importante que todo el mundo conozca bien el funcionamiento del ojo: “Imaginemos un balón de fútbol que posee un tono determinado. Imaginemos también que le hacemos un agujero por donde se escaparía el aire.”

El doctor añade que al trasladar este ejemplo al ojo, el nervio óptico sería el agujero del balón. “Lo que sucede es que cuando la tensión sube, la salida del aire se hace a través del agujero por el que van las fibras del nervio óptico y por lo tanto las matan. Y si no hay fibras que salgan del ojo y vayan hacia el cerebro, el ojo no funciona y, por tanto, está ciego. De ahí la importancia de que la tensión ocular se mantenga en los valores normales”, detalla el especialista.

¿Por qué sube la tensión ocular?

El encargado de regular la tensión ocular es un líquido llamado humor acuoso. Este se crea en una una estructura denominada Epitelio Ciliar que forma parte del cuerpo ciliar, y tiene un circuito dentro del ojo hasta su salida fundamentalmente por la malla trabecular.

“Sabemos que la presión intraocular no es constante durante todo el día sino que sigue un ciclo circadiano, estando más elevada por la noche cuando dormimos (se cree que esto es debido a la posición decúbito supino”, señala el doctor.

Tipos de Glaucoma

Así, existen diferentes tipos de clasificación para los glaucomas. Se pueden diferenciar entre:

  • Congénitos o adquiridos

  • De ángulo abierto o de ángulo cerrado: el más frecuente.

  • Primario o secundario (si se asocia a algún otro trastorno ocular o extraocular).

¿Qué factores influyen en el desarrollo de glaucoma?

Los principales factores de riesgo para padecer glaucoma son:

  • Presión intraocular elevada

  • Edad avanzada

  • Córnea delgada

  • Antecedentes familiares de glaucoma

También hay indicios, aunque menos convincentes, de que la miopía y la diabetes Mellitus serían factores de riesgo.

¿Cómo se mide la tensión ocular?

Los especialistas habitualmente miden la tensión ocular mediante el tonómetro de aplanamiento de Goldmann. Existe también otro método frecuente para tomar la PIO, la neumotonometría.

¿Basta con una tensión ocular alta para padecer la enfermedad?

Tener la tensión ocular alta no es siempre sinónimo de tener glaucoma. Habitualmente, para diagnosticar el glaucoma, además de una PIO elevada, nos basamos en otras pruebas complementarias como son: la campimetría, la paquimetría, y la tomografía de coherencia óptica (OCT).

Tratamiento

Principalmente el tratamiento es médico, mediante la instalación de gotas de distintos tipos: Análogos de prostaglandinas, Beta bloqueantes, Alfa agonistas, inhibidores de la anhidrasa carbónica o mióticos.

También existe tratamiento quirúrgico en determinadas situaciones: trabeculectomía, esclerotomía profunda no perforantes, y también dispositivos de drenaje.

Cómo actuar ante esta patología

Para el doctor, de esta información, cabe destacar la importancia de cómo actuar ante esta patología. Por un lado, es conveniente realizar revisiones oftalmológicas anuales a partir de los 40 años, especialmente los pacientes que posean antecedentes familiares de glaucoma.

Por el otro, es fundamental cumplir correctamente con el tratamiento, ya que de ello dependerá la evolución de la enfermedad.