Economía

Bilbao tiene comprometidos 2,5 millones para la Eurocopa, de los que la mitad ya están pagados

La competición podría generar en la capital vizcaína un impacto de 30 millones de euros que pueden volar a Sevilla, un nuevo mazazo para el sector hostelero

16 abril, 2021 18:00

A la espera de que la Uefa deshoje definitivamente la margarita, todo parece indicar que Bilbao en lugar de tener la Eurocopa, tendrá un agujero considerable que está todavía por ver cómo se reclamará. El Ayuntamiento de la capital vizcaína tiene adjudicados ya contratos por valor de 2,5 millones de euros dentro de los preparativos para la celebración de la competición, y de ese montante, la mitad, 1,3 millones, están ya pagados a las respectivas empresas.

Se trata de contratos relacionados fundamentalmente con  la seguridad del entorno y que llevan fraguándose desde 2018, año en el que se acordó que la Eurocopa de 2020 se celebraría en Bilbao, con presencia de la Selección Española. El año pasado no pudo jugarse por las restricciones de la pandemia y en el mes de junio todo apunta a que se elegirá Sevilla en lugar de la capital vizcaína ante las restricciones impuestas por el Gobierno vasco para que los cuatro partidos previstos se celebren con público, como quiere la federación europea. El Ejecutivo de Urkullu condiciona la asistencia de público a que se cumplan una serie de criterios que la federación de futbol considera imposibles de cumplir y que por lo tanto llevarían a unos partidos con San Mamés vacío. Entre las condiciones está tener un 60% de la población vacunada en el País Vasco y resto de España, antes de junio, o que no supere el 2% de las camas de las UCIS ocupadas por Covid para la fecha de los partidos. Tal y como está la situación de la epidemia en Euskadi, con casi 1.000 contagios al día, parece algo bastante difícil de cumplir, aunque si algo ha desmostrado la pandemia es que hace practicamente imposible establecer previsiones fiables con dos meses de plazo.

Inversiones e impacto

La inversión comprometida por el Ayuntamiento de Bilbao se refiere sobre todo a sistemas de protección y seguridad. De hecho, el concepto de gasto más elevado se corresponde  con la instalación de barreras capaces de soportar las embestidas de vehículos ante la posibilidad de que se produzcan atentados terroristas mediante este sistema, como ha ocurrido en otras ciudades europeas, como Londres o Niza. Estas barreras suponen un coste de 423.000 euros. 

El resto de las partidas se reparten en gastos para otras barreras de seguridad para  asegurar los recintos, y contratos relacionados con la movilidad, la seguridad, la señalización o la publicidad del evento a lo largo de la ciudad, la coordinación de grupos de trabajo de las áreas de comunicación y promoción, la asistencia técnica a la promoción económica, o las tarjetas de transporte relacionadas con la Eurocopa. 

Además hay otro millón y medio comprometido a medias entre Diputación y Gobierno vasco.

Pero más allá del gasto comprometido, la pérdida fundamental está en el impacto económico que la celebración de esta competición deportiva en Bilbao tendría sobre el entorno. Especialmente sobre los hosteleros y hoteles muy castigados por la crisis económica derivada de la pandemia. En total se estima que el impacto podría ascender a  30 millones de euros -teniendo en cuenta que el límite de espectadores se reduciría a un 25%-. Si se hubiera podido llenar San Mamés el impacto podría haberse elevado a 90.000 euros extrapolando lo conseguido en otras competiciones con menor impacto como los mundiales de rugby.  La mayor pérdida, no obstante, tiene que ver con la marca y la imagen, ya que un partido de estas características se ve por televisión por miles de telespectadores que ubicarían Bilbao en el mapa. La capital vizcaía ya ha comprobado con anterioridad con otros eventos como los mundiales de rugby o la MTV, que son la mejor forma de proporcionar el turismo en la ciudad.

Un  nuevo mazazo para la hostelería

Los sectores más  más perjudicados en el caso de que la eurocopa no se quede en Bilbao  serían los hosteleros y hoteles, que se muestran "muy preocupados" ante esta posibilidad, y resignados a perder un evento que podría salvarles en cierto modo un segundo año fatal para sus cuentas de resultados. 

"Es un  nuevo palo para la hostelería de Bizkaia" señala Boni García, presidente de la Asociación de Hosteleros de Bizkaia, que prefiere ser "optimista" y pensar que todavía hay posibilidades de que la Eurocopa se juegue en Bilbao.

Para los hosteleros sería muy importante que se pudiera llevar este evento, "con público". "Una Eurocopa sin público no hubiera salvado la hostelería", aunque en cualquier caso recuerda que este tipo de competiciones mueve mucha gente entre los clubes, los periodistas, etc, que darían un impulso al sector aunque se jugara con San Mamés vacío. Pero sobre todo lamenta que si se va a Sevilla se pierda el impacto de "promoción internacional de la ciudad", algo que, según recuerda "nos vendría muy bien de cara a al verano" o cuando se pueda viajar ya sin restricciones.

Héctor Sánchez, gerente de la asociación de hosteleros vizcaína, insiste también en que debe esperarse a lo que se decida finalmente el lunes, pero señala que los hosteleros, en la situación de incertidumbre en la que se encuentran "ya no cuentan con nada", en lo que se refiere a la previsión para sus negocios. "Las decisiones se adoptan día a día". 

Aunque de momento las instituciones se empeñan en asegurar que no hay ninguna comunicación oficial al respecto, y que "a día de hoy " la Eurocopa se jugará en Bilbao", lo cierto es que ya se empiezan a hacer cálculos sobre cómo recuperar ese dinero perdido y a quién reclamarlo. El PP vasco lo tiene claro: "El Ayuntamietnto de Bilbao debería reclamar ese dinero al Gobierno vasco, que es el que ha puesto todos los impedimentos posibles para que no se celebre la Eurocopa y que la Selección Española no juegue en San Mamés".

El concejal de este partido en el Ayuntamiento de Bilbao, Carlos García, es especialmente crítico con el Gobierno vasco al que acusa de "cargarse el legado" del alcalde Azkuna ya que fue el alcalde del PNV fallecido el primero que habló de traer la Eurocopa a la capital vizcaína. "Y ya entonces Iñigo Urkullu y José Luis Bilbao, entonces diputado general, salieron cargando contra la Selección Española", recuerda García. "Aquí hay un componente político, aunque lo quieran vestir de cuestión sanitaria. Y es que no se quiere que el primer partido con público en San Mamés en la pandemia, sea el de la Selección Española".